El invierno es una época que se asocia con resequedad en la piel, deshidratación y un cutis seco, pero con cuidados muy simples, eso puede no ser así. Los expertos en dermatología afirman que los meses más fríos son el mejor momento para crear una rutina saludable para el cuidado de la piel.

Amanda Flynn, experta en el tema y a cargo de un reconocido centro estético en Estados Unidos, compartió seis consejos básicos para cuidar la piel en la estación más fría del año y así tener un cutis radiante.

¿Qué ingredientes utilizar para cuidar tu piel?

Es más sencillo tener la piel más sensible en invierno por la caída de la humedad, los cambios de temperatura entre el interior y el exterior, entre otros factores. Estas características pueden ser contrarrestadas sumando algunos ingredientes clave en una rutina diaria de cuidado de la piel usando productos hidratantes o sueros.

“Nuestra piel se deshidrata y nuestra barrera protectora se deteriora, por lo que debemos ajustar nuestra rutina para concentrarnos en rehidratarla y retener la humedad. Los productos que contienen ceramidas, ácido hialurónico y vitamina E ayudan a repararla y reponer la hidratación perdida”, indica Flynn.

Usar protector solar en invierno

“A pesar de que los rayos UV son más bajos durante el invierno, no se puede escapar de ellos, incluso, durante estos meses más fríos", advierte Flynn, destacando la importancia de utilizar protectores solares durante todo el año.

Exfoliantes para proteger la piel

“Exfoliar una o dos veces a la semana elimina cualquier piel opaca y escamosa y permite que los ingredientes nutritivos de sus sueros y humectantes se absorban mejor”, explica la experta, poniendo en foco el beneficio de los exfoliantes al combatir la resequedad de la época, pero también eliminar restos de piel opaca.

“Lo ideal sería seguir con una máscara rica en vitaminas que calmará y restaurará la pérdida de humedad, además de darle a su piel un hermoso brillo invernal”, añadió.

Mantener la humedad en la piel

“Hay que aplicar sueros y crema hidratante inmediatamente después de la ducha para mantener el bienestar de la piel, idealmente dentro de los tres minutos reteniendo así la humedad (y eso también se aplica al cuerpo, no solo al rostro)”, comparte como una alternativa mucho más económica y sencilla para el cuidado de la piel.

Productos de reparación profunda

“Las brumas, sérums y sueros hidratantes son ideales para mantener la barrera saludable de la piel durante los meses de invierno, lo que ayuda a prevenir las irritaciones y la sensibilidad de la piel”, comenta. A veces no basta con una sola pasada de crema, sérum o suero, sino que Flynn destaca la importancia de las capas de protección. Hay productos que son aplicables uno sobre otro y pueden aportar una buena barrera protectora, desde la resequedad por el frío, la pérdida de hidratación y hasta contra los rayos UV.

Hacerle una visita a una cosmiatra

“Recomendamos la punción de la piel, los peelings profesionales y la IPL para rejuvenecer la piel y mejorar su tono y textura para garantizar que sea luminosa para el verano”, revela a modo de refuerzo con los tips anteriores.