escuchanos en vivo 03

¿Cuál es el secreto natural para mejorar la piel y lucir más joven?

Lejos de tratarse de algún tratamiento estético costoso o algo por el estilo, según un estudio reciente, el entrenamiento de fuerza mejora la salud del cutis.

Deportes 05 de agosto de 2023
Deportes
Deportes

Antes de pensar en tratamientos costosos con el objetivo de lograr una piel más fresca y joven, es conveniente intentar primero con empezar una rutina de ejercicios de fuerza. Además de tener beneficios para la salud integral, reduce los factores inflamatorios circulantes y mejora las matrices extracelulares dérmicas, según un estudio publicado en la revista Scientific Reports.

El estudio estuvo a cargo de Satoshi Fujita, científico del ejercicio en la Universidad Ritsumeikan en Kyoto, Japón, quien afirmó: “la piel de las personas se volvió más joven a nivel celular” después de que comenzaron a hacer ejercicio. Y los efectos más pronunciados ocurrieron cuando levantaron pesas.

Este hallazgo “se suma a la evidencia que respalda que el ejercicio” de cualquier tipo “es beneficioso para la salud de la piel”, agregó Mark Tarnopolsky, profesor, médico y director de la Clínica Neuromuscular y Neurometabólica de la Universidad McMaster en Hamilton, Canadá, quien si bien no participó en la nueva investigación es un especialista en los vínculos entre el ejercicio y la piel. Por lo que, dentro de todos los beneficios que encontramos en el ejercicio, ahora se suma uno nuevo en relación a la piel.

“Comparamos los efectos del entrenamiento aeróbico y entrenamiento de fuerza sobre el envejecimiento de la piel durante 16 semanas en un grupo de mujeres japonesas sanas sedentarias de mediana edad”, describieron los investigadores en la publicación de sus conclusiones. Y destacaron: “Ambas intervenciones mejoraron significativamente la elasticidad de la piel y la estructura dérmica superior, y el entrenamiento de fuerza también mejoró el espesor dérmico”.

Luego de demostrar que “después de la intervención de entrenamiento, la expresión de genes relacionados con la matriz extracelular dérmica aumentó en fibroblastos dérmicos primarios humanos normales”, los investigadores destacaron: “este es el primer informe que muestra diferentes efectos del ejercicio en el envejecimiento de la piel e identifica los factores clave involucrados en el rejuvenecimiento de la piel inducido por el entrenamiento de fuerza”.

Cómo fue llevado a cabo el estudio

Para el trabajo, Fujita y su equipo reunieron a 56 mujeres sedentarias de mediana edad y evaluaron la elasticidad, el grosor y la estructura de las capas dérmicas de la piel de su rostro mediante ultrasonido y otras medidas. También extrajeron sangre, la revisaron en busca de una variedad de sustancias y agregaron gotas a las células aisladas de la piel facial en placas de Petri.

Luego, asignaron a la mitad de las mujeres a comenzar a andar en bicicleta durante 30 minutos, dos veces por semana. El resto empezó a levantar pesas, también durante unos 30 minutos, dos veces por semana. Después de 16 semanas, los investigadores repitieron todas las pruebas. Y si bien vieron que las mujeres en general estaban más en forma si habían montado en bicicleta y más fuertes si habían levantado pesas -lo que indica los beneficios de ambos tipos de ejercicio-, observaron que su piel facial también había cambiado.

''La piel del rostro había mejorado la elasticidad, lo que significa que estaba un poco menos flácido y volvía a tomar forma mejor cuando se estiraba”, según revelaron los autores del trabajo. Además, “su matriz extracelular, o el andamiaje biológico que proporciona estructura al tejido de la piel, también era más densa, mientras que los genes implicados en la creación del colágeno de la piel estaban más activos.

Por último, agregaron que sólo el entrenamiento de resistencia aumentó el grosor de la capa dérmica, aparentemente al aumentar la actividad de varios genes especializados que bombean proteínas diseñadas para construir y fortalecer el tejido conectivo.

Los beneficios de hacer ejercicio de fuerza

La mayoría de las personas decide encarar una rutina de levantamiento de pesas con el objetivo de tonificar los músculos y mejorar la apariencia física, sin embargo los beneficios de un entrenamiento de fuerza van más allá, y se reflejan en la salud de los huesos y en el metabolismo en general. Sobre todo, después de los 40 años, edad en que el organismo tanto de hombres como mujeres sufre cambios propios del declive hormonal.

A partir de los 30 años, el cuerpo pierde entre el 3 y el 8% de la masa muscular por década, y más después de cumplir los 60. La densidad mineral ósea también comienza a disminuir en la mediana edad, lo que pone a las personas en riesgo de sufrir fracturas y osteoporosis. En estos casos, el entrenamiento de fuerza puede ayudar a la osteopenia, la pérdida de masa ósea y de la resistencia ósea que se provoca por cuestiones hormonales, pero también por la falta de este tipo de ejercicio.

El entrenamiento de fuerza puede ser una verdadera fuente de juventud si se lo aborda estratégicamente. Por lo general, las motivaciones suelen ser estéticas, dijo Amanda Thebe, una entrenadora personal con sede en Canadá que se especializa en trabajar con personas mayores de 40 años. Pero centrarse solo en grupos musculares aislados, como los abdominales o los bíceps, a menudo descuida otros músculos y no contribuye a la salud y la fuerza.

Para ella, “lo ideal es sumar ejercicios con movimientos compuestos, que trabajan varias articulaciones y músculos a la vez, como peso muerto y sentadilla”. “A partir de cierta edad se debe dar prioridad a los músculos centrales, que son los que van a contribuir a la fuerza general a medida que se envejece”.

Te puede interesar
Lo más visto